Aparecerán los que dicen, si no podés ganar, al menos sirve empatar o es mejor un punto que irse derrotado. Esos estoicos hinchas de Gimnasia , son los que terminan de aceptar, como el resto, que jugando bien hay más posibilidades de ganar, y que se puede tocar y rotar, al mismo tiempo que morder y raspar, pero nunca renunciar.
Y el Lobo, renunció -espero que sólo sea por esa tarde- en el General Gutierrez , a su esencia, la del buen juego; que a veces le lleva a perder por arriesgar, pero que no le quita el reconocimiento y los aplausos de su gente.
Atento Alaniz, que Viola, tuvo una tarde como las de Alasia, de aquellas que Matías sacaba casi diez de calificación,debido a las fragilidades defensivas. Cuidado Lechuga, que abusar del doble cinco, le quita juego al equipo y sin Arce y con Oga en el banco, dependemos de Betty Marmol, si ,la recordada picapiedra,que dice a cada rato, Cucchi,Cucchi. Porque si el Pato no la pide para tranquilizar y pensar, con el vértigo de los carrileros, seremos igual que el resto y Palacios Alvarenga, un espectador de lujo. Ojo, director técnico, que los últimos buenos quince minutos, fueron en gran parte, al desgaste físico del esfuerzo del celeste, más que de mérito blanquinegro, y que hubo un par de manos que en Salta , Tucumán, Cordoba o Santa Fe, al árbitro se las van a obligar a cobrar,por más dudosas que sean.
Nombrando esas provincias , estoy dando por descontado que Gimnasia pasa seguro, pero cuando cumpla el objetivo, deberá lidiar con ganadores de zonas , que no le van a perdonar una actuación de estas, ni permitir cuidar los jugadores claves que lo requieran y menos saldrán a buscarlo mientras el Mensana los espera con tranquilidad, porque los nueve puntos de ventaja,serán en la próxima fase ,un buen recuerdo.
Si amigo, se que querés subir a cualquier precio, como sea, se que pensás que puede ser un comentario negativo viendo la tabla, pero la tarde del ascenso con Aconquija y aquella noche con Talleres de Córdoba, son un claro ejemplo, de que al lobo picapiedra, lo podés llamar en muy pocas y contadas ocasiones.
Alaniz, de buena onda, siempre usted dice esas tres palabras después de los partidos :"esto es Gimnasia", y está todo dicho.
Por Carlos E. Guzzo