Las dudas de la primera parte se despertaron por algunos buenos momentos de Maipu, de dos ex Lobo como Amaya y Vuanello, que consiguieron adueñarse de la pelota ,por la soledad combativa de Cortizo , quien huérfano de colaboradores no podía entregar el balón ni a Becerra, ni a Barone ni a Navarro. Y sin la pelota, el Mensana, ni ningún equipo, pueden generar fútbol, que es justamente de lo que vive el Pituco ,sobre todo en el Legrotaglie, en donde lo incitan a ganar a ganar, y con algunos momentos de alto vuelo.
Por eso Fuentes no esperó ni siquiera un minuto de la segunda parte , para que de movida David Garay empezará a patrullar la cancha con muchísimo criterio y panorama, tal es así que el blanquinegro fue un equipo totalmente distinto al de la fallida primera parte. Distinto digo , porque el puntano se apropió de la pelota y Gimnasia del partido.
Pero la certeza no fue una,sino dos, tal como ocurrió con el ingreso de Agudiak,porque el Toro es jugador de área y no de las inmediaciones de ella.Y entonces Palacios Alvarenga tenía más espacios, que generaba el mismo Iván, siendo dos las alternatias ahora , cerca del área del ruso Vistarop. Alternativas que tenían, por un lado Becerra,que pudo correr la misma suerte del Chimi o Barone en la decisión táctica de Fuentes, y por otro lado Espinoza y su indeclinable verticalismo, sin olvidarnos de un jugador que se está constituyendo en una pieza clave, el Pela Aguirre.
Garay entonces lo caló al Palote que la durmió con el pecho y mientras se afilaba con la derecha para el disparo mortal, enganchó de zurda para dejarlo pagando al defensor que no pudo con el gran goleador que como él mismo lo dijo después del partido, se quedó para eso, convertir y convertir.
Pero no había que correr riesgos y por eso el Pituco insistía con la pelota, amiga ya de los jugadores, que la trataron con honores y la llevaron hacia la derecha para Becerra, que la puso en la cabeza de Aguirre, quien habilitó a Agudiak. Y entonces, el que saltó del banco,hizo todo bien , primero porque dio un paso atrás antes de acelerar hacia el punto del penal para no caer en offside y segundo porque con frialdad de definidor, le hizo un globo al uno maipucino, con gran clase. Entonces lo que quedaba ,ya estaba demás,como también lo estuvo, el patadón del Chelo Carrizo, otrora también jugador que vistiera el manto sagrado, al igual que el Pollo y el Negro.
Algunos dirán que el patrón de Tilisarao tiene que jugar de entrada,y otros que con dos delanteros de área , las posibilidades de gol son mayores.Pero con un plantel tan numeroso y lleno de grandes jugadores son innumerables las alternativas tácticas y futbolísticas del Lobo del Parque,que más de un equipo de la zona se puede sentir abrumado , por nombres y por jerarquía.
Por eso el secreto lo tendrá el técnico, el cual ya decidió que Marchiori sea el arquero, que Marín lidere en el fondo, que Aguirre no puede faltar nunca por la izquierda y que el Palote tiene que jugar los 90 porque es difícil que en una no te emboque. Y viendo esos aciertos, y los cambios rápidos que hizo ,sumado a los que también realizó en Catamarca ,cuando las papas quemaban,están hablando de alguien que entiende de ganar, de paladar y por sobre todo algo que no tienen muchos directores técnicos, de ser operativo y rápido en circunstancias donde al equipo no le va nada bien.
Creo como muchos que este equipo va por buen camino y si así sucede ,el sueño del ascenso volverá a colarse en las almohadas de los blanquinegros que saben que algún día se van a despertar, para jugar el Nacional B y más también. Pero para ello vale mucho disfrutar del momento, vale más no creerse más que ninguno y vale el triple jugar cada partido como si fuera el partido final
Rio Cuarto nos espera, Las Heras, Maipú, las Sierras de Aconquija, San Juan y San Luis también lo harán, pero no dejes de darte una vuelta por el Victor, porque algún dia del año que viene, la vuelta más grande, con humildad y sacrificio, la podemos dar.
Por el Lobo Pituco