El primer tiempo del partido comenzó con expectativas y contó con un fallo arbitral en el amanecer del partido que pudo haber cambiado el trámite del encuentro... . El árbitro ,Yael Falcón, hizo ´la vista gorda´ a una mano del defensa dentro del área del “Verdolaga” . Era penal. En el contraataque de la misma jugada llegó el primer gol del equipo de Buenos Aires. Tras la primer caída del arco Blanquinegro comenzaron las dudas en el juego.

Los minutos siguientes fueron todo para el Lobo, con Cristian Llama como pieza fundamental pero sin generar oportunidades claras que lograrán un empate en el marcador. Así se desempeñaron los siguientes minutos hasta que Ferro construyó una gran jugada colectiva que culminaría en el segundo tanto marcado por Bodacahar, extendiendo la diferencia y complicando aún más al Lobo. 

Diego Pozo era consciente de las deficiencias en el medio campo y decidió realizar un cambio buscando un revulsivo para el equipo. A los 31’ ingresó Fernando Cortez en lugar de Franco Carrasco. Los minutos finales fueron trabados en la mitad de la cancha, sin oportunidades claras para descontar en el marcador. 

El segundo tiempo comenzó con otra actitud, o por lo menos eso se vio los primeros minutos. A los 13’ Nicolás Gómez incrementó la diferencia para el ferroviario a 3-0 y dejaba casi sentenciado el partido. A los 24’ Gimnasia acorraló al rival en el área y tras una serie de córners seguidos, le cometieron un penal a Diego Mondino. El penal que se encargó de patear Cristian Llama y que estampó en el palo izquierdo del arquero Avellaneda. El Caracol no tenía la suerte de su lado, la pelota se negaba a entrar.

Casi sin querer y de manera inesperada llegó el descuento de Ramón Lentini para el lobo. Descuento que solo sumaría en lo anímico para el equipo que comenzó a buscar el empate del partido. Pero en el mejor momento del partido llegó el último gol de los Verdes. Ramírez marcó el 4-1 y enterró cualquier sueño de empate de Gimnsia. Con pocos minutos por jugar y las esperanzas desechas termino el partido. 

En la jornada de hoy pudimos ver lo que sería la peor actuación del equipo en el torneo. Vimos un equipo que tenía más dudas que certeza y lo caro que pueden pagar ser los errores. Vimos que no se puede depender de dos jugadores en un 11 titular y que si queremos plantear un proyecto de ascenso hay un cambio que necesita hacer.

Terminó la temporada, pero comenzó el tiempo de la autocrítica. Hay muchos valores y rendimiento que evaluar, de los jugadores y del cuerpo técnico. Hay tiempo para pensar y trabajar, si queremos encarar la siguiente temporada y buscar el ascenso...

*Por Tomas Linardelli