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Martes, 17 Abril 2018 22:47

En el banco estaba la solución

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Cuando llegás a las finales te toca jugar con los mejores y si ese día no jugás como uno de ellos, es probable que puedas perder. Y aunque lo importante es tener la esperanza de una revancha en cancha neutral,la realidad marca que Gimnasia debe dar vuelta la página rápidamente , pero no sin leer y analizar los errores que cometió ,y los recursos que le faltaron para salir victorioso con Central Córdoba de Santiago del Estero

El equipo santiagueño, que cuenta con el extraño antecedente de ganar un partido que salió 2 a 2, tiene argumentos futbolísticos que cuando desaparecen, lo transforman en un equipo bastante recio y duro, al que que se le suma por un lado la benevolencia de los arbitrajes para con ellos y la experiencia de veteranos jugadores especialistas en partidos difíciles y en hacer tiempo.

Por su parte en el Lobo quedaron muy limitados los recursos generadores de ideas y juego, desde el momento que los visitantes fueron todos sobre Llama ,para a no dejarlo pensar, y asi apagarlo durante gran parte del encuentro, a pesar de que Cristian siempre intentó ponerse el equipo al hombro.

Y por eso el Mensana no pudo hilvanar juego asociado cuando el partido empezó a necesitarlo , porque además Central no dejó imprimirle vértigo al match, que es el que necesita Espinoza, y si se las ingenió en ponerlo nervioso e incómodo al Pato Cucci, que se enroscó con los ferroviarios.Para colmo se perdieron un gol increíble cunado Vella la quisó pinchar y al ratito cuando Viola tuvo que hacer una de sus atajadas acostumbradas para que no quedaramos zapateros ante un disparo del nombrado y peligroso Vella.

Al partido le faltaron jugadas de riesgo en el primer tiempo y en lo poco que iba del segundo tiempo, hasta que como dice aquella frase de una vieja propaganda que terminó en slogan, en el banco estaba la solución.

Fue cuando saltó Garay, a recuperar con Briones las pelotas que no se encontraban ,y a comenzar a organizar a su manera ,junto a Llamas Y Cucci , a un equipo que no pareció nunca encontrar el rumbo necesario que necesitaba. Pero no lo ayudó al ingreso del puntano el destino, porque cuando parecía que de a poco el pituco se las iba a ingeniar para hacer la diferencia, un fallido rechazo de Mondino ,fue excelentemente atajado por Viola ,que nada pudo hacer ante el oportunismo y certeza del goleador Diego La Joya Jara. Casi les diría que aquel gol fue como un golpe al mentón en una pelea pareja, un golpe que te hace besar la lona , pero que también te pone en una situación limite, de tener que sacar de la galera algun recurso, que te haga sentir recuperado ante los que dudaron de tus virtudes. Y la fórmula volvió a estar entre los que estaban sentados mirando el partido más chivo del campeonato.Allí había un pibe de las inferiores, lleno de ilusión y de entusiasmo que entró en un momento complicado, y empezó a mostrar desparpajo y atrevimiento para sacar adelante la contienda Mientras los santiagueños se ocupaban de seguir haciendo faltas que les costó la expulsión de Diaz , al tiempo que manfestaban su admiración por Ricardo Darín en cada roce del encuentro. Asi fue que , Nicolás Romano, se metió de prepo y por amor a la camiseta en el área por la derecha , sin importarle la experiencia del paraguayo Vera Oviedo, quien cuando quiso cubrirlo con los brazos para que la pelota se fuera por línea final, se lo encontró delante de sus narices enfilándolo a Taborda y le cometió un penal indiscutible.

Entonces Palacios Alvarenga que hizo lo que pudo pivoteando, y esperando una que otra oportunidad, patéo magistralmente el balón, que por un lado llevó a un empate al Gigante,que lo dejaba mano a mano para la última fecha , y que por otra parte, espantó una dolorosa derrota que lo condenaba a pelear por el segundo ascenso. Y hubo que sufrir por ir a buscarlo, envalentonados por el Turco Marin que cumplió con creces en llevar el bastón de mando a partir del empate y en cubrir las espaldas de sus compañeros durante toda la noche. Y hablo de sufrir, porque a favor se tuvo que soportar una milagrosa salvada en la línea de Romero tras disparo de Agudiak y porque en contra, se tuvo que asistir a una escena, en donde Ezequiel Viola,que se había jugado la tibia y peroné en el sexto minuto de adicional , controló con seguridad el último tiro libre que parecía llevar una bala de plata. Nos queda Estudiantes de Rio Cuarto, que ni siquiera ganando podrá salir de la quinta posición, que deberá reservar jugadores para pelear el segundo ascenso y que por lo que le hicieron entre Lobo Medina, el Consejo y los de Santiago, podrían aprovechar para una vil venganza. Pero en el fútbol la pelota si se mancha a veces , y como dice el Negro Rada, siempre en los conciertos pasan cosas raras. A los de Coleoni les queda con Ramallo en su casa, y si bien ganando esperarán que el Lobo pierda puntos, puede que encuentren en Defensores un hueso duro de roer.Es que los granates si vencen, pueden llegar a triple empate con sus vencidos y el Lobo, o quedarse con un segundo lugar ,que les hará definir los partidos por el segundo ascenso siempre de local. Y a nosotros que nos queda.Por suerte una nueva chance para no desperdiciar, una especie de un doble match point a donde no se puede fallar. Para ello habrá que adosarle juego al ímpetu y ver si con alguna variante, o al menos Oga no sentado en la tribuna, se le puede ganar la pulseada a los riocuartenses y quizás ascender o jugar una gran final.

Nada está dicho, y menos terminado, como cuando pareció después del gol de Jara. Y todo gracias a que como dijimos , en el banco estaba la solución, primero con Garay y después por la gran noche que jamás olvidará : el Nico Romano.

Por el Lobo Pituco

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